AGRADECIMIENTO A LA PARROQUIA DE SAN PEDRO APÓSTOL DE LA ATALAYA DE GUÍA Y A LA EMPRESA DE ROPA DEPORTIVA ONDINA.

 

AGRADECIMIENTO A LA PARROQUIA DE SAN PEDRO APÓSTOL DE LA ATALAYA DE GUÍA Y A LA EMPRESA DE ROPA DEPORTIVA ONDINA.

 

Hace un mes recibí la alegre noticia de que en la Parroquia de San Pedro Apóstol de la Atalaya de Guía (Gran Canaria) estaban organizando un Sorteo Solidario para los proyectos que coordino en Mozambique. El grupo de solidaridad de la parroquia, integrado en Cáritas parroquial, sigue con su Mostrador solidario y desde hace unos 15 años esta parroquia no para de organizar nuevas iniciativas para ayudar a estos pequeños “sueños de educación” en Mozambique.

El 24 de junio de este mismo año, los niños y niñas de catequesis, sus catequistas, sus padres y madres, reunieron muchísimo dinero en Huchas de Primera Comunión, y me lo enviaron junto con fotos y vídeos de ese día tan especial.

El día 27 de octubre se hizo el sorteo de la cesta de ropa deportiva. Hoy mi gozo es triple: en primer lugar, por la Empresa ONDINA que donó ropa deportiva para sortear; en segundo lugar, por todas las personas que compraron un número para colaborar y otras que no se llevaron el boleto, pero dejaron su contribución solidaria; y en tercer lugar, porque la señora que ganó el premio lo ha donado a Cáritas para que se entregue a alguna familia necesitada. La solidaridad es circular, nunca para cuando encuentra buenos corazones.

Gracias a todas las personas que organizaron este sorteo; gracias a la Parroquia que busca abrirse al mundo desde la solidaridad; gracias a las personas que colaboran anónimamente “para que tu mano izquierda no sepa lo que ha hecho tu derecha”; gracias, gracias, gracias… Y gracias en el Cielo a Don Pedro Monzón Suárez que me abrió las puertas al Norte, para conocer a tantas personas maravillosas con las que guardo una profunda amistad.

Ya tengo muchas ganas de verlos, y les prometo que en vacaciones del próximo año iré, si Dios quiere, para estar con ustedes y agradecerles en primera persona su generosidad y su gran contribución a la misión. Tatenda kwene-kwene!